El telón se alzó de nuevo. Esta vez le tocó el turno a la "Pequeña compañía del teatro de Vandalia" formada por alumnado de 1º ESO. Pusieron en escena El retablo de las maravillas de Cervantes y El enfermo imaginario de Molière, ambas obras adaptadas por Encarnación Ferré. Los chicos estuvieron estupendos. Tienen todavía esa naturalidad incólume. ¿Hasta cuándo, oh, pudores adolescentes? Uno, la verdad, se siente orgulloso; el proyecto llegó a buen término, con los agobios de última hora, claro. Para ellos todavía más un juego, quizá. Siembra de recuerdos, tal vez. Sea como fuere...
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3 comentarios:
Todo un éxito, desde luego. Hubo risas y admiración por parte de los espectadores. Además… ¡cómo disfrutaron en el escenario todos los miembros de esta especial compañía! Seguro que no olvidarán nunca los ensayos, las pruebas de vestuario y, sobre todo, el vértigo del estreno y los aplausos. Y todo ello, gracias a un profesor dinámico, generoso, que pone por delante su vocación a cualquier esfuerzo: Jesús Pérez-Sevilla. ¡Tenemos mucha suerte de contar con él en el Instituto! ¡Se levantará más veces el telón!
Todo un éxito, desde luego. Hubo risas y admiración por parte de los espectadores. Además… ¡cómo disfrutaron en el escenario todos los miembros de esta especial compañía! Seguro que no olvidarán nunca los ensayos, las pruebas de vestuario y, sobre todo, el vértigo del estreno y los aplausos. Y todo ello, gracias a un profesor dinámico, generoso, que pone por delante su vocación a cualquier esfuerzo: Jesús Pérez-Sevilla. ¡Tenemos mucha suerte de contar con él en el Instituto! ¡Se levantará más veces el telón!
Me gusta que se realicen diferentes presentaciones de teatro. En la Compañia
de Seguro para la cual trabajaba, todos los años para el final se realizaba una cena donde siempre había una representación teatral
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